El poemario en versión digital

GIRAPOEMA en formato de revista digital gracias a Dennis Mariella.
ESCRIBIENDO CONTIGO O SIN TI


Si me pides que deje de escribir o actuar para dedicarme solamente a ti;

no voy a aceptar.

Prefiero sentir mi alma resquebrajándose durante mil años,

hacer del mar mis lagrimas y de los riscos el pozo de mi dolor.

Escojo vivir con esas terribles grietas en las venas;

lo prefiero a retirar las letras de mí.

Lo decreto antes de dejar de contar historias en los distintos escenarios.

Porque si ello se ausentara más de cinco minutos,

dejaría de respirar,

muriendo así por causas naturales antes siquiera de empezar a llorar por ti.





Aunque no seria mala idea

después de 500 años

ceder a tu amor y quedar petrificado.

Convertirme en una estatua más de la colección de tu sala

y ser recordado como el poeta de piedra que no supo amarte,

como el actor que siempre mintió arriba de una tabla para decir la verdad.





Ámame así o sal huyendo antes de que se quemen tus piernas.

La pasión por mi trabajo puede enardecer a cualquiera.

Escucha las letras que salen de mí

ó corre a otro paraíso tapándote los oídos.



Veme a ver al teatro sin importar que las obras sean para niños.



Lee mis tonterías y dame el avión pensando en que algún día llegaré al valle de lo sublime.

Regáñame de vez en cuando si no escribo

y pídeme siempre que interprete mejor mi papel.



Leamos juntos a Buckowsky, Zaid, Baudelaire, Rimbaud, Zonta y Aridjis.

Oigamos a Bach, Vivaldi, Dark Soho y Astrid.

Vayamos a ver a Cauduro y a mi viejo amigo Aquiles que nunca te presenté.

Gocemos del musical de Mecano sin arrepentirnos de la década de los 80.

y hagamos del Lago de los Cisnes una tradición.







Solo así recibirás flores todos los días,

tendrás poemas que te hagan siete veces el amor.

Amanecerás exhausta entre mis brazos

y harás de tu estancia una sonrisa compartida.

Disfrutaré contigo una hora de caricias tiernas

te quitaré las lagañas con un desayuno a la carta,

serás libre de fabricar tu día

y consentiré tus humores si amanecieras adolecida.



Óyeme así o petrifícame dentro de 500 años,

sella tu amor en un beso con condiciones

ó calla hasta entonces conmigo.

Edifiquemos almas o sal a platicarle a otra persona sobre la historia del dinero,

consuélate con una casa en Long Beach

y trata de conocer a algunos amantes en el cementerio.



Porque de ser así,

tu y yo aunque bajo tierra estemos

no compartiremos las mismas tumbas ni tendremos al mismo anfitrión.

Yo seré invitado al baile del cempasúchil

y tú al homenaje de los faraones perdidos.

Yo cenaré pan de muerto y mucbipollo

y tú pedirás espaguetis para llevar.

Pasarás los días extrañando tus vestidos y pensando en quien pueda estar presumiéndolos ahora.



Yo,

seguiré escribiendo y pisando de vez en cuando esa divina tabla con otra historia nueva que contar.

Cobraré las funciones y no desistiré de dar una que otra cortesía para quien me caiga bien.



Ya que te conozco diría que siempre consigues lo que quieres,

eres tenaz, determinada y serías capaz de pasar un milenio en el intento por conseguirme,

pero de no compartirme como soy,

tardarán 500 años tus murmullos

para que yo pueda ceder a tu amor.

Solo así lograrás tener en tu sala

a ese poeta de malaquita;

tú pensando cada tarde atemporal

en el idiota insensible que alguna vez conociste y que no pudiste aprehender en vida

y yo sin poder mover ni mis ojos, seguiré labrando una inscripción que diga:



"El dolor deja sabiduría acerca de la resistencia"



Porque te conozco también te digo que si me compartes como soy,

harás lo que quieras conmigo,

cumpliré cada uno de tus sueños

sin importar lo que me cueste el diamante que seguro pedirás.

Saldremos a viajar cada que estés aburrida

y conversaremos las horas que nos alcancen hasta que se detenga el tiempo entre tu y yo.

Te llevaré al mar Caribe de vez en cuando para charlar con las orquídeas de Solferino,

observaremos juntos el desfile de los peces Loro,

y si corremos con suerte,

una escuela de rayas águila se alojará unos meses en la isla de Cozumel pasando antes por Holbox en dirección a Río Lagartos.




Viviremos la evolución del arte de nuestros compañeros en el querido Quintana Roo.

Añoraremos las viejas reuniones de largo aliento en la que tú y yo nos conocimos,

haré siempre lo mejor de ti,

y hasta cocinaré en ocasiones especiales.



Una vez despidiéndonos de nuestros entrañables amigos,

conoceremos la Sagrada familia, la torre Eiffel, Valencia y Costa Rica.

Te amaré durante los 1000 años que viviré con la fortuna de tu amor

y moriré por ti de ser necesario.

Yo siendo poeta y actor

y tu feliz de que yo lo sea.





Te suplico que no me pidas que me dedique solamente a ti,

es muy difícil explicar un camino con corazón.

No me demandes elegir, escoger ó preferir,

sería ofrecerte la amarga decisión

de escribir contigo o sin ti.



Carlos Wilheme – México

Lo reciente en LetrasKiltras

Blog Archive